viernes, 8 de noviembre de 2019

POSTALES DESDE EEUU - PARTE 2 : GRAND CANYON NATIONAL PARK (sept 2019)

Para hablar de Naturaleza (con mayúsculas) nada mejor que hacer una visita al Gran Cañón del Colorado. En nuestro caso esa visita iba a estar comprimida en un par de días, tiempo más que suficiente para admirar esta maravilla y darse alguna caminata que otra.
Como introducción os daré algunos datos sobre Grand Canyon :
Está situado en el Estado de Arizona y tiene una longitud de 446 kms. y se extiende entre el lago Mead al Oeste y el lago Powell al Noreste. Fue tallado por el río Colorado a lo largo de los siglos y es todo un museo geológico al aire libre que nos explica la evolución de la Tierra desde hace más de dos mil millones de años. Pensemos que se trata de una gran meseta que se elevó por encima de los 2.000 metros de altitud mientras era excavada por el río Colorado. Sus dos orillas, la Norte a más de 2.700 m. de altitud y la Sur a 2.300 m. están separadas en su punto más próximo por unos 6 kms. mientras que su anchura máxima ronda casi los 30 kms.
La orilla Norte (North Rim) más salvaje y menos turistizada sólo está accesible al público entre mayo y octubre siempre que las condiciones del clima lo permitan. El borde Sur (South Rim) es el realmente turístico, está abierto todo el año y dispone de toda la infraestructura necesaria para el turismo.
Sus primeros pobladores eran tribus indias, hoy relegadas en reservas. Havasupai, Navajo, Hopi, Hualapai, Yavapai, Apaches o Zunis eran los amos y señores de la zona antes de la llegada del hombre blanco, por cierto el primero fue un español García López de Cárdenas allá por 1540.
Fue declarado Parque Nacional en 1919 por lo que justamente este año celebra su centenario.
Alguna curiosidad más os iré contando conforme avancemos en el reportaje.
Para encajar esta visita en el conjunto de nuestro viaje había que hilar fino y tenerlo todo previsto de antemano, sobre todo el alojamiento ya que dentro del Parque Nacional está bastante limitado y en los aledaños tampoco es fácil conseguirlo y más en esta época del año, no olvidemos que recibe más de 5 millones de visitas al año. Para acceder a los Parques Nacionales de EEUU hay que pagar tanto si accedes en vehículo como si lo haces a pie. De modo que hay que ser previsor y conseguir un pase que por 80$ (por vehículo incluyendo a sus ocupantes) te da acceso a todos ellos durante un año. Eso te puede evitar alguna cola. Además nosotros lo íbamos a amortizar porque no sería el único Parque Nacional que visitaríamos.
Dicho ésto, cogemos un avión y nos trasladamos desde Nueva York a la costa Oeste, a Las Vegas (5 horitas de vuelo y tres franjas horarias.

Ya volveremos a Las Vegas más adelante

Noche en la "ciudad del pecado", de la que os hablaré en otro post y al día siguiente, coche de alquiler y ruta hacia el Grand Canyon (como reza su eslogan del centenario GO CANYON).


Por delante 450 kms (o como dicen por allí, 279 millas).


De camino algunos puntos interesantes como éste mirador sobre el Lake Mead, el mayor embalse artificial de EEUU.





Un poco más adelante llegamos a otro punto espectacular, un puente al que se accede por este zigzagueante camino ...



... que cruza el río Colorado y separa los estados de Nevada y Arizona.
Se inauguró en 2010 y está dedicado a la memoria del señor O'Callaghan (Gobernador de Nevada en los años 70s) y de Pat Tillman, de Arizona, jugador de fútbol americano que murió por fuego amigo en Afganistán.

Dejamos Nevada

Advertencias en el puente
 Una obra de envergadura que sirve de mirador sobre otra no menos espectacular, la presa Hoover.



Entramos en Arizona
La presa se construyó entre 1931 y 1936 y está considerada como Lugar Histórico Nacional. 
La carretera pasaba por ella antes de la construcción del puente.
Ciudades como Los Ángeles o Las Vegas nada serían sin esta monumental obra.

Presa Hoover y Puente O'Callaghan Tillman desde Arizona
Tras la visita a la presa Hoover ya nos fuimos de un tirón hacia Grand Canyon.
Y que mejor para una primera toma de contacto que sobrevolarlo en helicóptero. Tuvimos la suerte de poder adelantar la hora del vuelo antes de entrar en el Parque Nacional. Hay varias empresas que los ofrecen (la nuestra fue Papillon) y todas tienen su base en el pueblo de Tusayan, a la entrada del Parque.


La experiencia fue impactante e inolvidable. Las extensas vistas sobre Grand Canyon dan una idea sobre las magnitudes del escenario.
El tajo principal, el cañón propiamente dicho, estás a su vez surcado por decenas de otros barrancos subsidiarios que bien podían ser cada uno de ellos como un "Ordesa" para que os hagáis una idea de lo bestial que es.


El río Colorado bien visible desde el aire




Tusayan
Para empezar no ha estado nada mal ¿eh?.
Entramos después al Parque para dirigirnos al que sería durante un par de días nuestro alojamiento, el Yavapai Lodge, bien recomendable.


Con toda la tarde por delante no perdimos el tiempo y nos fuimos a explorar el South Rim.
Hay un sendero, el South Rim Trail, que recorre todo el borde de la parte central del cañón desde sus dos extremos y tiene una longitud de unos 21 kms. Para recorrerlos lo mejor es hacerlo a pie o hacer uso de los autobuses gratuitos que recorren la orilla sur y te acercan a los miradores, el coche mejor dejarlo en el parking. En este sentido los americanos lo tienen muy bien montado. El sendero, a tramos cementado, está delimitado en muchos puntos con barreras de protección sobre todo en los mismos miradores pero, por regla general, uno se puede acercar al borde en busca de trampolines o puntos de vista alternativos con el consiguiente peligro. Cada año fallecen por imprudencias decenas de personas al salirse del camino marcado.
Muchos de esos miradores tienen preciosos nombres de raíces indias, Hopi, Mohave, Yaki, Maricopa, Lipan etc.
Dada la hora decidimos ir en bus a la busca de uno de ellos en el extremo Oeste que nos ofreciera una buena puesta de sol. El elegido fue Hopi Point, bien concurrido para disfrutar del espectáculo cromático del atardecer.











El intenso día toca a su fin pero a Judit y Jordi todavía les quedaron ganas de salir por la noche para ver el firmamento que andaba un poco amagado por las nubes.
Lo que sí que no hubo que perderse fue el amanecer, otro acontecimiento de luces y sombras sobre el Grand Canyon que nos dejó alucinados.
El mirador elegido fue Maricopa Point con extensas vistas hacia el Este. Todo un acierto esa elección.




Después del alba nos fuimos paseando hasta Yaki Point pasando por otros tantos miradores, como Yavapai o Mather Point.




Un paseo en la historia geológica del cañón donde se nos guía a través de millones de años representados con marcas en el suelo.


Cerca de Yavapai Point se encuentra el Centro de Visitantes del Parque y por allí nace uno de los senderos más famosos que bajan hacia el río Colorado, el Bright Angel Trail.


Un serpenteante sendero que salva más de 1.500 m. de desnivel hasta el lecho del río. Si lo quieres hacer de ida y vuelta hasta el South Rim recomiendan no hacerlo en un sólo día si no estás bien preparado físicamente y dispuesto a soportar temperaturas extremas en esta época del año. Nos quedamos con las ganas porque era nuestro último día en Grand Canyon y no daba para tanto.



 Nos conformamos con admirar el espectacular sendero desde las alturas mientras bajaban por él un grupo de excursionistas a caballo cual cowboys.







El resto de la mañana lo aprovechamos para seguir recorriendo la parte central del South Rim.









Por la tarde y tras recoger los bártulos nos fuimos hacia zona Este del South Rim para ...


... disfrutar de más miradores como Moran Point donde se encuentra la curiosa formación del Duck on a Rock (el Pato en la Roca) ya admirada en los años 50s por el presidente Eisenhower y que la erosión va minando poco a poco hasta que del pato no quede ni el pico.





Hicimos la penúltima parada en el Grandview Point que hace honor a su nombre y desde donde parte otro trail famoso hacia el Colorado.





Y nos despedimos del Grand Canyon desde Desert View, la salida Este y otro espectacular mirador.
Allí encontramos la Desert View Watchtower, una torre-museo diseñada por Mary Elizabeth Jane Colter una famosa arquitecta que también proyectó varios edificios de estilo neo-colonial dentro del Parque. Esta torre vigía se construyó en 1932.





Y más vistas hacia el Este, el Desierto de Arizona ...



Cedar Mountain da paso al desierto de Arizona
... recorrido por la popular Ruta 64 que será nuestra vía de salida camino de nuestra siguiente parada, la Nación Navajo y algunas de sus joyas ocultas ...
To be continued.

6 comentarios :

Mariajosecaminos. dijo...

Qué espectáculo de la naturaleza!!!! Preciosas las fotos aunque seguro que ni punto de comparación entre verlo allí en vivo y directo.

paco domingo dijo...

Hola Maria José, una verdadera maravilla que no te deja indiferente. Y como suele ocurrir siempre por mucho que queramos, las fotos no reflejan la magnitud del paraje. Un saludo.

Daniel Alcalá Almela dijo...

Hola Paco.

Con tu permiso me he saltado las crónicas del Comapedrosa y NYC, que prometo leer y comentar, y me he ido de cabeza a esta del Gran Cañón del Colorado.
Qué pasada!!, y qué privilegio el vuestro de poder haber admirado con vuestros ojos, primero desde el aire, y luego a pie, este impresionante paraje, una de las mejores y más majestuosas obras de la naturaleza en todo el planeta. Mi más sincera enhorabuena!!! Como bien apunta María José, por muchos documentales que hayamos visto y reportajes que hayamos leído, este Gran Cañón es muchísimo más impresionante en vivo y en directo.

Un abrazo.

paco domingo dijo...

Hola Dani, permiso concedido, faltaría más. Realmente es impresionante, por la magnitud, la grandiosidad, los paredones, los barrancos, que como digo en el post cada uno es un Ordesa y me quedo corto. A mí me gustó más patearlo desde el South Rim que desde el aire en helicóptero. Tampoco es que el vuelo de media hora hiciera locuras de bajar por el cañón, siempre era a una altura relativa y en un tramo determinado. Pero vale la pena y más al ser la primera toma de contacto. Y hablando de documentales no os perdáis si tenéis ocasión éste de Netflix (https://www.youtube.com/watch?v=Uu2FpNmtBIw).
En resumen, el Grand Canyon es el Grand Canyon, lo que ocurre es que una cosa es verlo en plan turista como en nuestro caso y otra es pasarte allí una semana y hacer algún trail. Pero íbamos a lo que íbamos y me quedé con ganas de más. Menos mal, y ya lo verás en otros post, que me quité un poco la espinita montañera después.
Un abrazo.

Toni dijo...

Oh my god!!

Que maravilla Paco!! Como comentáis, es de esos sitios que verlo en directo con los ojos de uno deber ser bestial y totalmente diferente a verlo en películas o documentales, y eso que las fotos nos acercan un poco.
Que tremenda erosión hacia abajo ha debido hacer el río !! Mi hijo mayor lo ha volado en helicóptero y luego le bajaron a pie de río (no sé en que parte del cañón en helicóptero si lo hizo)

Cuando vas a estos lugares (a mi me pasó en NZ) te quedas pensando porque no tendrás más tiempo (y dinero) y te quedas haciendo un trekking de esos de tres semanas conociéndolo más profundamente que la primera vez modo turista, porque esa senda serpenteante que baja al río debe ser una pasada.

Un abrazo.

paco domingo dijo...

Tú lo has dicho Toni, Tiempo y Dinero, las dos cosas. Pero en fin, por lo menos lo hemos visto y disfrutado aunque sólo haya sido por un par de días. Y lo del helicóptero está bien aunque no fue lo que más me gustó. Lo mío es patear más que volar. Un abrazo.