DESERT DE LES PALMES : ROCA BLANCA Y EL MORICO (19/02/2011)

¡ Que gusto da cuando terminas una ruta como ésta !. En compañía de gente a la que aprecias y ,además, en este entorno tan chulo y que era casi desconocido para mí. Ruta corta y ,en algunos tramos, exigente y divertida.

Creo que son estos dos adjetivos (exigente y divertida)  los que mejor definen este recorrido. Un tobogán en forma de ocho.
Os cuento:
Se inicia esta ruta pasado el kilómetro 5 de la CV-147, por la que se accede al Desert de les Palmes desde Castelló. Hay una señal del Parque en el inicio de una pista, donde se puede dejar el coche. Como casi siempre, hacemos coincidir el inicio cuando los primeros rayos de sol se deciden a salir de su escondrijo nocturno. Cruzamos la carretera y enseguida vemos un camino que sale hacia la derecha. En pocos metros nos encontramos con la Font de Xiva y el Mas del mismo nombre. Mas yo diría que es un Mas abandonado.

Como también lo está la Emita de la Virgen de la Salud, donde llegamos tras un pequeño descenso.En este tramo el sol ilumina toda la Plana castellonense ofreciéndonos una preciosa postal. La Ermita está en un bonito paraje bastante dejado de la mano de dios.Digamos que la capilla y el entorno, no hacen honor a su nombre...por lo de la Salud, digo.
Ahora toca subir por una senda que nace detrás de la presilla que cierra el barranco de la Ermita, y que gira  a la izquierda (¡atención a la pintada del suelo!). Ganamos altura poco a poco hasta un mirador a la base del pico de la Roca Blanca. Desde allí podemos contemplar todo Espadán y la Plana, al sur. A nuestras espaldas queda la Roca Blanca . Hacia la costa  se distingue el Port de Castelló y mar adentro, les Illes Columbretes.
Un buen lugar para el "duro trago" de un almuerzo Rocacoscolliano.Sobre todo mirando lo que nos queda de subida hasta la Roca Blanca. Superado el trauma post-almuerzo, toca subir. Ya era hora, pensaba alguno...

Conque "dificultad alta"...eh! ...Tranquilos que lo diver empieza ahora.
Un buen desnivel que salvamos recorriendo la senda en zig-zag hasta la cumbre del Roca Blanca. Buenas vistas de la parte oeste del macizo del Desert. ¿Quién o que domina siempre esta vista?...Efectivamente...

el "pesao" del Penyagolosa, que siempre está ahí dispuesto a ofrecerse para salir en la foto. Eso es chupar cámara... ¿o no?. Algunas rocas en voladizo sobre la vertiente oeste, nos sirven de plató fotográfico. Ya vemos el Pico del Morico hacia el norte, próxima parada de la jornada. Pero toca bajar hasta un colladito que será el que nos cruzará el "8" de la ruta. Ante lo que se avecinaba hubo quién, con buen criterio, decidió esperar en el cruce. El resto y cada uno a su ritmo, atacamos el Morico (sin segundas intenciones...que la cosa está que arde en el Norte de Africa) que oponía resistencia en forma de grandes bloques de rodeno asentados en su falda. La senda se perdía por entre las rocas. Atentos a las fitas y algunas flechas pintadas. Unas divertidas trepaditas y ¡ alle hop! ...estamos en la cima del Morico. Mejores vistas todavía. Benicasim, les agulles de Santa Águeda, el Bartolo y sus antenas (sin TV3...por cierto) y todo lo visto antes. Reagrupamiento tras la subida y descenso posterior, al principio por la cresta y después enlazando por la izquierda con la senda que rodea el Morico por su cara oeste. Esta es la zona que mejor conserva la pinada que ,en su día, ocupaba gran parte de estos montes y que ,por desgracia, se perdió deborada por las llamas .

Tras una ligera subida llegamos al collado donde se cruza el "8" y donde nos esperaban, apurando charla y espirituoso, J.Miguel y Angel, que vigilaron nuestra retaguardia durante la conquista del Morico.
Luego todo descenso por senda marcada hasta la carretera y los coches.

En resumen: exigente y divertida.
Como ésta...las que haga falta!.
Ale que me voy a descansar para afrontar el próximo Tourmalet y a ver si me quito el catarrillo de encima.

Adeu!!!