Chula y gratificante como os comentaba sobre todo por la belleza del objetivo principal de la ruta, el Chorrador del Mas de Andreu (aunque el chorrador también lo casan con otro mas, el de Sevilla, tanto monta monta tanto). Se trata de una espectacular cascada que, afortunadamente y tras las recientes lluvias otoñales, estaba pletórica. Sin menospreciar el resto del recorrido que también tuvo su encanto por la calidad de sus sendas y las vistas sobre el Barranc del Salt del Cavall y del macizo de Penyagolosa. Tan sólo un "pero" que deslució el final de la ruta como ya veréis.
La ruta no presenta dificultades técnicas, únicamente la entrada y salida de la cascada en la que habrá que extremar las precauciones. Solventado ésto, pocas dificultades más vamos a encontrar. Las sendas se encuentran en perfecto estado gracias al buen quehacer dels Amics dels Camins de Ferradura de Llucena, bien señalizadas aunque tampoco está de más el GPS.
Allá vamos pues sin más preámbulos.
Al tratarse de una ruta circular la podemos comenzar desde varios puntos. Nosotros lo hicimos desde casi el mismo Llucena. El punto de inicio habrá que localizarlo junto a la fábrica de cerámica Brayen en el Polígono industrial de les Foies. A ver cómo os lo explico ... Conviene llegar hasta Llucena y volver para atrás por la CV-190 dirección Figueroles. Por la derecha veremos una pista cementada con una cadena y un poco más adelante nace otra antes de una cerrada curva. Por allí subiremos para aparcar unos metros más arriba.
Procuraremos seguir las marcas blanquiazules en casi todo el recorrido.
Aquí tenemos estas paletas indicativas para comenzar. Iremos en dirección del Mas de Granell ...
... siguiendo el camino, Pista de les Foies, que bordea la fábrica Brayen.
Un poco más adelante dejamos el camino para tomar un sendero por la derecha ...
... que se va elevando en dirección ...
... al Mas de Granell que ya vemos en lo alto.
Vistazo abajo sobre el polígono de les Foies |
El Gegant de Pedra y en el centro el Collet del Ferrís por donde pasaremos a la vuelta |
Última rampa hasta el Mas de Granell |
Mas de Granell y abajo la Caseta de Sevilla |
Seguiremos por la derecha siguiendo la pista del Mas.
Un vivo Mas de Granell |
... por la que alcanzaremos la carretera CV-193 que conecta con Argelita.
El Coll de les Coronetes nos queda a la izquierda ...
... pero cruzaremos la carretera para seguir por el sendero.
Algunos carteles a mano encontraremos junto a los postes más recientes |
Vistazo atrás sobre el coll de les Coronetes y la Casa del Rosari |
A nuestra izquierda la Caseta del Pixac |
Buen mirador.
Caseta del Pixac a la derecha y la de Rosari a la izquierda y detrás la loma del Tossal del Perro |
El Mas de Andreu de Baix sobre el Barranc del Salt del Cavall |
Una gran carrasca nos saluda |
El Barranc del Salt del Cavall dibuja un gran tajo que será nuestro objetivo.
Mas d'Andreu de Baix |
Detrás la nariz de la Roca Alta |
El Barranc del Salt del Cavall y el Molí del Rosat. Eso tiene buena pinta. |
Un privilegiado balcón para almorzar |
Cruzamos el Barranco y nos acercamos al Mas d'Andreu de Baix.
Mas d'Andreu de Baix |
... que nos lleva al Nou Mas d'Andreu.
Tanto el Mas Nou como sus campos abancalados se ven bien cuidados.
Desde aquí comienza la parte más divertida y espectacular del día. Sobrepasamos las casetas del Mas por una senda que se va adentrando en el tajo del Barranc del Salt.
Llegamos a una balsa rebosante de frescas y cristalinas aguas con algún habitante piscícola de buen tamaño.
El agua llega conducida por una pequeña acequia por la que continuaremos.
Este tramo exige de la máxima atención y precaución por el buen patio que tenemos hacia el barranco y por la cantidad de agua que baja. La estrechez del senderillo inundado hará inevitable que nos mojemos las botas.
Llegaremos a un pequeño azud ...
... tras el que nos espera la joya de la jornada.
Nos adentramos en un bello rincón siguiendo aguas arriba ...
... hasta que se cierra con el gran salto del Chorrador. Las últimas lluvias otoñales garantizaban un buen caudal y no nos defraudó.
Una profunda poza recibe el agua de la cascada. El salto debe de tener unos 30 o 35 metros y es uno de los más bellos que he visto por nuestros lares.
Las cámaras echan humo porque el rincón bien lo merece.
Chorrador del Mas d'Andreu (que recibe el agua) aunque también lo he visto como Salt del Mas de Sevilla (desde donde cae) |
Aquí viene la respuesta. Aunque parece un callejón sin salida hay una buena escapatoria por la pared de la izquierda según miras la cascada. Nos alzamos siguiendo un rastro de senda bajo las paredes de la montaña ...
... con una buena caída de modo que iremos con tiento.
Una cuerda pasamanos nos ayuda para salvar un pasito complicado.
Vistas sobre la parte alta del salto y el Mas de Sevilla que asoma arriba |
Vistas aguas abajo sobre la balsa y la acequia |
Impresionante el rincón |
... el sendero del Mas de Sevilla.
Mas de Sevilla |
Pero antes y allí mismo vimos unas fitas que tiraban hacia la parte alta del Barranc. Todo indicaba que bajaban hasta la cabecera del Chorrador. Pues vamos a verlo ¿no?.
Mientras el grupo seguía por el sendero , J.Manuel y yo bajamos por la pendiente hasta el nacimiento de la cascada.
Valió la pena para calibrar la magnitud del Chorrador alimentado por cristalinas aguas. En las rocas del nacimiento del salto hay parabolts señal inequívoca de un disfrutón rápel ... ¿A que no me equivoco Dani?.
Volvemos para arriba de nuevo al sendero. Como os decía allí podéis tirar hacia el Mas de Sevilla o, como en nuestro caso, hacia el Mas d'Andreu de Dalt. Una u otra opción (la nuestra más larga) nos llevarán hasta la Font de l'Esqueix, siguiente punto interesante del recorrido.
Mas de Sevilla |
Vistazo atrás sobre el Mas d'Andreu de Dalt |
En ligero ascenso seguimos hacia el Mas de la Lloma.
Abajo queda el Mas d'Andreu de Baix |
Mas de la Lloma |
Vistas al Sur sobre el skyline de Espadán |
Enfrente, como siempre, Penyagolosa, guapa como ella sóla |
Hacia el Noroeste, Penyagolosa y Tossal de la Nevera y Espaneguera |
Continuamos por la vereda ...
... y estaremos atentos porque una fita por la izquierda nos indica el inicio de un pronunciado descenso ...
... hasta el paraje de la Font de l'Esqueix, en el cauce del Barranc del Salt del Cavall, que viene como ya visteis con bastante agua.
Nos acercamos hasta la fuente para refrescarnos.
Cruzamos el barranco y seguimos por la pista, PR-CV 327.
Otra mirada sobre el Mas de Sevilla |
... donde seguiremos por la derecha.
Desde el camino podemos apreciar la belleza del Barranc del Salt y reconocer el camino que nos llevó hasta el Chorrador.
Un nuevo cruce en la Lloma del Hostalet que tomaremos por la izquierda en dirección al Collet de Ferrís.
Llucena a la vista |
Justo antes de llegar a la carretera pasaremos junto a una fuente-abrevadero seca.
Seguiremos unos metros por la izquierda de la carretera rodeando otra fábrica de cerámica, Fabresa ...
... hasta el Collet de Ferrís y allí continuaremos por la derecha dejando la carretera.
Collet de Ferrís y granja del Muixo |
Nos despedimos de Penyagolosa desde el Collet de Ferrís |
... para acabar enmarañándose por una ladera desangelada llena de maleza y troncos caídos donde se pierden las señales y la senda.
Abocamos a la pista cementada del inicio y a los coches. En fin, un punto negro que requeriría de una alternativa en condiciones y que a pesar de todo no nos quitó el buen sabor de boca de una bella ruta por Llucena.
(by J.Manuel) |
2 comentarios :
No te equivocas en absoluto amigo Paco, uno de los rápeles más bonitos que he hecho en mi intermitente carrera como barranquista, a la altura del Chorrador de Zucaina y el rápel final del Barranco del Manzano, sin duda este trío conforman, en mi opinión, el "top 3" de cascadas de la provincia, incluso por delante de algunas tan famosas como la del Río Carbo o el Salto de la Novia de Navajas.
Tiene buena pinta y apuntada queda esta opción senderista a este Chorrador.
Y vaya con el término de Llucena, cuanto y que bueno por ofrecer.
Un abrazo.
Hola Dani, una gran ruta sí señor. Ese día me comentó J.Manuel que había visto en tu blog la bajada barranquista por el Chorrador y no tardé mucho en acudir a esa enciclopedia bloguera que es Per Dalt i Per Baix para disfrutar con tu acuática crónica. Con la cantidad de agua que caía (en tu día y en el mío) era para disfrutar como un enano.
Y ya sabes, neoprenos aparte, patear este bonito rincón de Llucena también tiene su encanto.
Un abrazo.
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