miércoles, 9 de abril de 2014

UN PASEO POR EL ALT MAESTRAT Y ELS PORTS - GR-M PARTE 8 : FORTANETE - VALDELINARES (05/04/2014)

Seguimos nuestro periplo por el Maestrazgo turolense que nunca deja de sorprendernos. Y para muestra, un botón. Hoy nos espera otra etapa de las que no se olvidan. ¡Y ya van unas cuantas así!. A este paso se me van acabar los adjetivos.
El paseo de hoy será de algo más de 24 kms., algunos más de los previstos inicialmente. Es lo que pasa cuando recorres estos espectaculares parajes. Que si un desvío por aquí, que si vamos a ver las vistas desde allí, que si un barranquito por allá, vamos que te embelesas y a la que te das cuenta te has salido de la ruta. Y eso que hoy lo teníamos muy fácil, sólo teníamos que seguir las marcas del GR-8. Por cierto, recién rediseñado en su primer tramo para evitar algunos kilómetros de asfalto; lo cual siempre es de agradecer, aunque casi al final volveríamos a pisar la carretera.
Desde la bonita Fortanete nos iremos hasta Valdelinares, el municipio más alto de España.
¿Me acompañáis?. Pues abrigaos bien que por estos lares todavía hace rasquilla.
Como Fortanete queda un poquillo lejos de Valencia, algunos, andarines y no andarines, que también los había, optaron por pernoctar en Cantavieja la noche anterior. ¡Hay que ver de lo que es capaz la gente con tal de no pegarse el madrugón!. El resto tuvimos que saltar de la piltra cuando las calles todavía no estaban ni puestas para estar puntuales en la salida. Dicen que sarna con gusto no pica ... ¡pero vaya sueño que hacía!.
Carretera y manta. Y también niebla, espesa ella desde Linares de Mora hasta Fortanete. Y también rodales de nieve (¡Hoy pisaríamos más nieve!). Y también una vaca que aparece de entre la niebla y apunto estamos de comernos un chuletón. Y también unos corzos y una familia de cabras montesas. Y un bonito amanecer desde las alturas turolenses. Todo esto sin empezar a andar ..., la cosa prometía.
Llegamos a Fortanete perfectamente sincronizados con los que acudían desde Cantavieja y a las ocho en punto echábamos a andar. Temperatura 4ºC.
Si en nuestra anterior etapa cruzamos el pueblo sin prestarle la atención que bien merece, hoy nos dimos un paseíto por sus calles y plazas. Un pecado no hacerlo.


Su Iglesia gótica, sus casas con blasones, sus balcones, retratan su pasado señorial.





En la plaza, junto a la Iglesia Parroquial, encontramos una original escultura dedicada al GR-8.




Salimos del pueblo cruzando el río Fortanete por otra joya arquitectónica, un bonito puente medieval de un solo ojo.


Encontramos las primeras señales del GR en los muros de piedra seca que delimitan varias pequeñas parcelas-huerto.



Pasamos junto a un pequeño lavadero y nos despedimos del pueblo echando la vista atrás.


Llegamos a un cruce señalizado donde rechazamos seguir el GR-8, ya lo encontraremos un poco más adelante, para seguir hacia la Ermita de San Cristóbal enclavada en un altozano en mitad del valle.




Seguimos por este camino hasta la carreterilla que viene de Valdelinares.


Giramos a la izquierda y unos metros más adelante la dejamos por la derecha. Otro camino rural y a seguir. Pasamos junto a un corral


para volver a girar por la izquierda junto al Masico del Duque y más abajo una fuente abrevadero en busca, ahora sí, del GR-8.


Un poste nos indica la dirección a seguir. Nos vamos hacia el barranco de Zoticos o Rambla del Mal Burgo.


Se acabó el llanear. Hasta Valdelinares nos espera una casi continua subida.
Primera parada del día en la Ermita del Buen Suceso, junto al Mas de las Matanzas.



Su porche es un lugar ideal para almorzar y no nos lo pensamos dos veces.
Y a seguir toca. Continuamos pista arriba con el barranco de Zoticos a la izquierda. Otro Mas nos sale al paso, el de la Casa Cañada, justo cuando el barranco parece estrecharse.





Las dos laderas parecen querer abrazarse aprisionando el cauce en una profunda garganta, el Estrecho del Barranco se llama, como no podía ser de otra manera.


Aguas arriba y siguiendo por el camino, se abre un bonito valle.



Pasamos junto a la Casa de la Cañada y más adelante la Masía de Zoticos.


La ladera por la que vamos es la de solana, está deforestada y con algunos bancales para pasto del ganado. La de enfrente es la Umbría de Mal Burgo y está tapizada con el verde de una hermosa pinada.
Una valla con una puerta a prueba de senderistas y bikers nos obliga bien a saltarla o a evitarla remontando la ladera.


Hubo diversidad de opiniones y al final ganaron los que optaron por saltarla. Los que optamos por intentar superar la valla ladera arriba nos vimos obligados a desistir (la valla era como la de Melilla pero en mini y sin concertinas) y volver al camino. Por si faltaba algo, un cartel nos avisaba de la presencia de reses bravas. Las vimos en la siguiente Masía, la Casa Visitación como reza el cartel de su fachada trasera, aunque en los mapas figura como Casa del Veterinario.




Bueno, en realidad sólo vimos el cráneo y la cornamenta de una de ellas colgado en la puerta de los corrales y un grupo de caballos observándonos desde las alturas al más puro estilo western.



Vista atrás hacia la Casa Visitación
Un poco más adelante aparece otra casa, Visitación ¿bis?.



Ahora seguimos por una bonita senda empedrada que remonta un barranco y lo cruza más arriba hasta unos pastizales desde los que obtenemos buenas vistas de todo lo recorrido hasta el momento.


Vista atrás del barranco recorrido hasta el momento


A la izquierda tenemos otro Mas, el Mas Alto (desde luego es el que está más alto de todos los que hemos pasado).

Anemone nemorosa (Flor del viento u Olor de zorro)
A partir de aquí, y por si no fuera suficiente, el recorrido va a ganar en belleza.

MªJosé ante el barranco de Zoticos. Podemos apreciar el contraste entre las dos laderas del barranco salpicado de mases.
El barranco vuelve a estrecharse y conviene acercarse al borde para contemplar, en la ladera de enfrente, las Manaderas de la Boca Negra. Se trata de unas cascadas que surgen a borbotones por unas bocas que se abren en las paredes rocosas de la montaña.


Un espectacular y curioso fenómeno geológico de carácter kárstico. La ladera absorbe toda el agua de deshielo de la montaña (de hecho todavía quedaban algunos rodales de nieve) y acaba surgiendo por esas bocas para precipitarse al cauce.


Podríamos considerar esto como el nacimiento del río Pitarque, aunque el barranco aún sigue recogiendo aguas de las montañas adyacentes y de la plataforma superior del Cuarto del Prado. Este sistema kárstico, Conjunto de Boca Negra, es objeto de estudio espeleológico.
Seguimos ...
El barranco vuelve a estrecharse y ganamos altura mientras la herbosa senda discurre bajo las paredes de los Montes de Tarrascón.





No me resisto a circular por los bordes y por un momento me olvido de la senda.


Fácilmente se accede al cauce e incluso se puede transitar por él, junto al río.




Es una verdadera gozada. Aparecen rodales de nieve que contrastan con el verde del barranco.


Invito al resto del equipo a bajar y caminar por aquí. La sorpresa aparece más adelante, cuando las paredes se cierran definitivamente obligando al río a despeñarse en una preciosa cascada. Una bella y fotogénica sorpresa.




El problema surgió después a la hora de continuar el camino. Unas no muy definidas sendas se dibujaban por la ladera de la izquierda y decidimos subir por allí con la esperanza de conectar con una pista que se dibujaba en los mapas del GPS un poco más arriba para cruzar el río por encima de la cascada.


Pero la cosa se torció ante la imposibilidad de flanquear las murallas rocosas que teníamos por encima. Aún así aún recorrimos unos metros de la ladera del barranco del Quemado que aboca al de Zoticos.
Tiramos para abajo para cruzar el río de nuevo y volver a subir por la empinada ladera, ahora sí la buena, y volver a enlazar arriba con la senda que, os recuerdo, se llama GR-8.


La ladera de enfrente que nos tocó renunciar


Encontrar sus señales blanquirrojas fue un alivio.
Un retraso que nos obligaría a renunciar a la subida al Alto del Hornillo, lo dejamos para la próxima etapa.
La senda atraviesa ahora un denso pinar de pino silvestre con algunos ejemplares de gran porte.


Allí nos cruzamos con una amable pareja de montañeros, buenos conocedores del lugar que nos indicaron otras rutas a tener en cuenta para otra visita.
Una vez arriba volvemos a cruzar el río que ahora discurre plácido por un precioso vallecillo salpicado por el blanco de la nieve.




Foto de grupo al canto.

(by J.Manuel)
Ahora las señales del GR continúan por la ladera izquierda.
Una ligera subida hasta alcanzar una pista,y por ella, hasta la carretera de Fortanete o Pista de Tarrascón.



Una pena que el GR no evite estos tres kilómetros de asfalto porque el cauce del barranco parece transitable.





Enfrente divisamos el Alto del Hornillo que, como antes os comentaba, iba a ser la última tachuela del día con sus 2001m., pero que con el retraso que llevábamos lo dejamos para la próxima.

Al fondo, el Alto del Hornillo
Dejamos la carretera en la Cruz del Prado, la parte más alta (ésta sí) de nuestra ruta.


Ante nosotros, allá a lo lejos, las pistas de esquí de la estación de Valdelinares.

Inicio de la bajada a Valdelinares, enfrente sus pistas de esquí
En el collado parece que hayan abierto las puertas de la nevera y toca volver a abrigarse en la bajada a Valdelinares. Bajada que comienza allí mismo dejando la carretera por una camino a la izquierda.


Narcissus pseudonarcissus (Narciso de los prados o, como los llaman en la zona, bambolías)
Entrando en Valdelinares
En un periquete llegamos al pueblo más alto de España donde nos esperaban MªAmparo, Isabel y Fernando (ya en su fase final de recuperación) para acompañarnos en una estupenda y bien ganada comida.



Quedaba después volver a Fortanete para recoger los coches para lo cual contamos con la inestimable performance taxística de Fernando que transportó a los chóferes para tal cometido. El resto nos quedamos chupiteando al calor de la estufa del bar.
Y así transcurrió una bonita, como pocas, etapa de nuestro particular y genuíno GR-M.
Ya estoy esperando la siguiente ...
Adéu.


No hay comentarios :