miércoles, 6 de marzo de 2013

OSSET - PEÑAPARDA (02/03/2013)

¡Qué pasa!
Todo el mundo se fue el finde pasado en busca de la nieve ...
Pues nosotros no íbamos a ser menos.
Tras el paso del frente que nos obsequió con una nevada de las que hacen historia no íbamos a desaprovechar la oportunidad ¿verdad?.
Realmente fue histórica, por su generosidad en cuanto a cantidad y por cubrir las sierras tan próximas a la costa. Esta vez no hubo que irse muy lejos para deleitarnos con el manto blanco.
Nosotros tuvimos que echar mano del "plan B". El "plan A" se desestimó precisamente por la copiosa nevada. Tras las consultas oportunas por parte de Manolo M. a sus paisanos de Vilafranca aplazamos el inicio de nuestro periplo por el Maestrat (en adelante GR-M) a pesar de tener programada la primera etapa, Culla-Vilafranca, para el sábado 2 de Marzo. Había caído en la zona la nevada del siglo y había dejado casi un metro de nieve. ¡Como para hacerte los 27 kms. de la etapa en esas condiciones!.
De modo que ... : "plan B".
Nos vamos a subir el Peñaparda desde Osset. Desde Valencia ya veíamos las sierras cubiertas de blanco lo que nos garantizaba nieve. Lo que no imaginábamos era el espesor de la capa con la que nos encontraríamos.
Hasta Osset la carretera estaba perfectamente transitable. Una vez en el pueblo nos recibió un bonito muñeco que nos anunciaba lo que nos quedaba por delante.

Osset
Hacía frío pero los primeros rayos de sol y la ausencia de viento nos auguraban una estupenda mañana.
Nos encaminamos hacia la zona recreativa al norte del pueblo para tomar la senda del PR-CV 176 (Andilla-Alcublas). Otro muñeco de nieve nos salió al paso. La cosa pintaba muy bien.



Recién comenzamos a subir nos cruzamos con cuatro senderistas de Lliria (de la Colla Calderona) con los que compartiríamos gran parte de la ruta.
Ya pudimos apreciar, nieve aparte, las funestas consecuencias del pavoroso incendio que azotó la sierra este verano. Si bien el manto blanco alegraba la vista, el contraste con el negro de los pinos quemados no dejó de impresionarme durante toda la mañana.

Contraste en blanco y negro

Rafa y al fondo Fernando junto al barranco de la Hoya
Conforme subíamos, la senda dejaba de apreciarse y el grosor de la capa de nieve aumentaba. El barranco de la Hoya, a nuestra derecha, relucía precioso. Intentamos hacerlo más llevadero a base de relevos para abrir huella. Lo cierto es que Pedro (uno de los de Lliria) se lo curró de lo lindo (se nota lo fuerte que estaba) en la ardua tarea de marcar el paso. Pudimos atajar muchas lazadas de  la invisible senda a costa de hundirnos hasta más arriba de las rodillas. El sol ya estaba funcionando a pleno rendimiento y sobraba alguna capa de ropa. Alcanzamos el collado y la meseta superior de la sierra allí donde la senda se junta con la pista del camino de Peñaparda. Lo abandonamos por la izquierda para alcanzar la cima con sus 1.312 m. Allí el espesor todavía era mayor. Sobresalía el vértice geodésico y la caseta, en su base, estaba rodeada por un metro de nieve.

Es lo que toca ...

Así relucía la cima del Peñaparda
Fotos de rigor y reconocimiento de los alrededores. La sierra del Toro al norte, la Bellida al noreste y muy a lo lejos Penyagolosa, Espadán al este. Todo relucía con el blanco inmaculado de la nieve. Un espectáculo impagable.




Buscamos acomodo entre unas rocas para practicar la ceremonia del almuerzo compartiendo con el grupo de Lliria dulces y espirituosos varios. Todo sea para entrar en calor...

Pasaba por allí ...
Una vez repuestos, los vecinos tiraron por delante y nosotros nos desviamos hacia el norte hasta un bonito mirador con Andilla y la Pobleta en el fondo del precioso valle nevado.

Mirador de Andilla y la Pobleta

Manolo M. disfrutando como un crío 

La bajada por el barranco de Peñaparda fue otra gozada. Allí, el mundo vegetal parecía haber resistido al incendio y mantenía el verde. El paraje requería un montón de fotos y algún revolcón croquetero.




Bajada por el barranco de Peñaparda
El barranco se abre y enlazamos con la pista que baja a Andilla para dejarla al poco por la izquierda.

Un respiro en la pista de Andilla
Remontamos un buen trecho hasta el collado de Tigüela bajo el alto de Aparicio.

Collado de Tigüela
Desde allí nos esperaba una bajada que fue otro cantar. La nieve comenzaba a derretirse y la senda se convertía poco a poco en un engrudo chocolatero y además resbaladizo. Pudimos evitarnos algunos metros bajando a la trocha junto al tendido eléctrico.


Nuria y Paco de bajada
El barranco del Cañuelo nos acompañaría de regreso a Osset.



Llegando a Osset
Lo que quedaba del muñeco ...
Acabamos bastante empapados en este tramo final, cosa que no empañó, en absoluto, esta estupenda ruta invernal. Una ruta inesperada y que resultó memorable. Y es que, a veces, es mejor el "plan B"...
Un saludo a los amigos de la Colla Calderona.

Junto a la Colla Calderona (by J.Manuel)
Adéu.



5 comentarios :

Jose dijo...

Hola Paco
No había que desaprovechar esta oportunidad de pisar nieve en cantidad y además cerca de casa, creo que todos hemos pensado lo mismo más o menos...

Por cierto de la gente de la Colla Calderona con la que coincidiste, después de ver la foto de grupo te puedo decir que yo también he compartido ruta un par de veces con Pere y Paco. Casualidades de la vida!!!

Un abrazo
Jose

trotasendas dijo...

Si que molo esta temporal de nieve. Creo que todos lo hemos aprovechado de lo lindo jejeje.
Allí también cayo una buena capa por lo que veo.
La ruta , pues yo tenía esta montaña en pendientes pero tras el incendio la he dejado aparcada y por lo que veo se llevó un buen tute. Lástima , es una pena comprobar por tus fotos la magnitud del desastre en esa zona.
Saludos

Anónimo dijo...

Esta fue una de mis primeras rutas de senderismo y le guardo un grato recuerdo. Tenía en mente volver a hacerla cuando sucedió el terrible incendio del verano pasado. Me ha dolido ver algunas de las fotos aunque la goma de borrar de la nieve le dé una melancólica belleza. Un abrazo

paco domingo dijo...

Hola Jose's, y Paco.
Buena gente los de la colla Calderona, sí señor.
Y tenéis razón, la nieve "maquilló" los efectos del incendio. No será lo mismo sin el tapiz blanco. Una pena.
Adéu.

javiher dijo...

Hola;
Soy vecino de Osset.Esas marcas q se ven en la fuente de abajo,seguramente las dejó una de las riadas q asolan de cuando en cuando tras el incendio.
Si queréis verlas:
http://www.youtube.com/watch?v=XHTwYasoBXE

y también a tomar por saco el parque
en

http://www.youtube.com/watch?v=-GSvbZDc3pY