domingo, 26 de agosto de 2012

HRP ETAPA 6 - COL DE BAGARGIAK - CABAÑA DE ARDANÉ (27/07/2012)

Viernes 27 de julio.

Otra buena etapa montañera la que afrontábamos hoy. Como estrella de la jornada la ascensión al Ori, el primer dosmil del Pirineo desde el Cantábrico, una emblemática cima compartida con el país vecino, bella y atrayente.

¡A por él!

Antes de empezar a patear, y como decíamos ayer, la mañana empezó un poco torcida. El plan era desayunar en el bar y cargar algo de pan y fruta para las dos jornadas que nos quedaban (ya que no íbamos a pasar por ningún punto de avituallamiento).
El bar abría a eso de las 8:30 h. y puntuales allí estábamos.

El bar de marras

- Buenos días, somos seis para desayunar.
- ¿Han reservado?
- ¿Cómo...? Anoche nada comentasteis sobre la necesidad de reservar para un desayuno normal y corriente.
- Sólo damos desayunos con reserva. (En la mesa contígua desayunaba a lo grande un grupo).
- Si queréis café y zumo (de "lata" por supuesto) os lo podemos servir.
Y con eso nos quedamos, sin un maldito trozo de pan o madalenas... Ná de ná.
Adiós y gracias "amigos"... muy amables.
La tienda de al lado también está regentada por los mismos y entramos para comprar el abastecimiento de las dos jornadas. Estaba más pelada que una bola de billar. Nos tuvimos que conformar con un par de cajas de galletas y dos briks de zumo. El pan, recién llegado, resulta que también era por encargo y a duras penas conseguimos tres barras (menos mal que el jamón lo poníamos nosotros jejeje).
¡Vaya desastre amigos!. Si acudís por "Les Chalêts d'Iraty", recordad que tenéis que reservar hasta para mear. Adiós señores, hasta la próxima...
Pero vamos a lo que vamos.
Salimos del Col de Bagargi retomando el GR-10 que sube sepenteante evitando lazadas de la carretera de servicio de las cabañas o chalets. En un primer collado dejamos el GR para continuar por una cota más alta por la cresta d'Orgambideska (1420 m.) hasta el Col de Méhatzé. Seguimos por la senda hacia el sur sin perder altura. Las vistas de los valles a ambos lados son magníficas. Son zonas de pastoreo y allí campa a sus anchas la variada fauna lugareña. Las mayores alturas las tenemos por la derecha, el Péllusegagna y el Odeyzu.
Tras este cómodo, de momento, sendero hubo un momento de duda. Mientras Fernando y yo ascendimos hacia la Cresta de Millagaté llegando a la cota 1450 m. (por donde nos llevaba el track), Ximo y J.Manuel continuaron por la senda de abajo que se internaba en un bosquecillo. A nosotros se nos unieron Begoña y Manolo en el collado.

Begoña y Manolo de subida a la cresta de Millagaté

Fernando en la cresta

Un bonito cresteo manteniendo la altura nos volvió a unir poco después a todo el grupo. Continuamos subiendo, más cómodamente ahora, hasta el Col de Tharta donde pasturaban las ovejas.

Begoña con el perro pastor

Después la pendiente se endurece hasta alcanzar la cresta de Zazpigaina donde reaparecen las mugas fronterizas. Ya vemos con mucha claridad toda la cresta del Ori que nos queda por delante. Nos queda un buen trecho todavía.

Lo que queda todavía

Subida al Zazpigaina

Otra rampa más hasta alcanzar las rocas del Zazpigaina (1765 m.). Las rodeamos por su vertiente española hasta una brecha bien visible. Allí la cosa se complica un poco.

Cresteo del Zazpigaina (1765 m.)

Nos fuimos por la cara oeste, muy aérea y complicada hasta un punto (y Fernando dio fe de ello) muy arriesgado sin posibilidad de continuación sin los medios apropiados. Lo sensato era volver a la brecha y eso hicimos. Una placa atestiguaba algún trágico accidente acaecido en este lugar. Releímos los apuntes y nos dimos cuenta (Ximo ya lo había advertido) que, desde la brecha, se apreciaba una senda por el este que llegaba hasta la zona alambrada y segura del lomo del Ori. Superado este momento adrenalínico bajamos por entre las rocas por un tramo bastante vertical hasta enlazar con el senderillo. ¡Bingo!, complicación felizmente resuelta. No me imagino este paso en condiciones climatológicas adversas.

El Ori a tiro

De allí todo coser y cantar hasta la cima del Ori (2017 m. y vértice geodésico).
Fotos y alegría con excelentes vistas.

En la cima del Ori (2017 m.)...
... y con la otra bandera (by J.Manuel)

Charla con una familia vasca con sus peques antes de despedirnos de esta bonita cima. En 2005 la ascendí, por primera y única vez hasta la fecha, con mi hijo.

Con Jordi en 2005

En aquella ocasión lo hicimos desde el túnel y el collado de Origaratea, vertiente española, una subida mucho más sencilla aunque todavía lo es más la que sube desde el puerto de Larrau.
Y por allí bajaremos.
Hizo su aparición la niebla que se condensaba en la vertiente francesa, habitual por otra parte.

Bajando hasta el puerto de Larrau

En el parking del puerto de Larrau, una amable persona nos ofreció agua, bueno se la pidió Ximo. A esas alturas de la jornada empezaba a escasear el líquido elemento, cosa a tener en cuenta en estas largas travesías. Procuramos ahorrarla al máximo a sabiendas de que reponerla en Ardané iba a ser una incógnita y todavía teníamos otra jornada por delante. Pero de eso hablaremos más tarde, todavía no hemos llegado.

Puerto de Larrau (1580 m.)


Enlace con el GR-12

Desde Larrau continuamos hacia el este siguiendo la valla y las mugas fronterizas. La niebla lo envolvía todo. Las señalizaciones del GR-12, por donde transitábamos apenas era visibles. Nos acompañaban las manadas de caballos que pastaban plácidamente.

Por el Port de Betzula (1540 m.)

Hubo que estar atentos al GPS y no despistarnos. Se sucedían las lomas  y collados siempre alrededor de la cota 1600m. Collado y pico de Betzula, Bildocharreko, Gaztarrigaigna hasta llegar a Col d'Elursoko (1650 m.) donde nos despedimos del GR y giramos hacia el norte.

Fernando ....

.... y Ximo  llegando a Gaztarrigaina


Port de Gaztarrigaina (1732 m.)

Allí comenzaba la bajada por una ladera herbosa. La niebla dio una pequeña tregua conforme bajábamos y se nos abrió ante nosotros el precioso valle de Ardané. Una zona de pastoreo muy transitada por el ganado a esas horas. A Fernando aún le dio tiempo de tentar a una vaca que, mansurreando, rechazó el engaño en forma de bandera de Rocacoscolla, la roja para mayor atrevimiento del valiente diestro.

Preparando los trastos de lidia

En el fondo del valle serpenteaba un riachuelo y enfrente apareció una cabaña de piedra. Era nuestro hospedaje para esa noche (cabaña de Ardané Gagnekoa a 1325 m.).

El valle de Ardané y la cabaña allá abajo

Desde la pista bajamos a la trocha y deprisa con ganas de descubrir en qué condiciones estaría la pulguera. Afortunadamente estaba abierta y parecía bastante decente. Había incluso colchones para 12 personas en dos alturas, su mesa, bancos de madera y chimenea. Teníamos otra en la recámara por si fallaba ésta o estaba ocupada. No hizo falta.
Una vez aposentados merendamos tranquilamente mientras nos relajábamos con la vista del valle y el ganado. Apuramos las penúltimas raciones de jamón (hay que ver el juego que nos dio el jamoncito de Teruel, eso sí, envasado al vacio en seis cómodas raciones). De postre galletitas y chocolate.

Una merienda en el campo

Comenzaba a chispear cuando apareció una pareja de jóvenes montañeros franceses que compartirían aposento. Bueno uno de ellos, el otro prefirió instalarse en su tienda afuera.


Estaban realizando también la HRP (qué otra cosa vienes a hacer por estos lares si no). Charlamos con ellos amablemente y les ofrecimos un poco de pata de gorrino curada (para que sepan lo que es bueno).
J.Manuel había leído un comentario sobre la existencia de un manantial un poco valle arriba. Lo localizaron bajo unas rocas a la altura de un corral (Ardané Gaina). Parecía bien protegido e inaccesible para el ganado y no dudamos en reponer cantimploras con su fresquísima agua.

                         
                                                                          Panorama del precioso valle de Ardané

Un merecido descanso antes del anochecer con una bonita puesta de sol y un último tentempié de jamón antes de meterse en la piltra.

La cena en la pulguera...


... y a dormir.

Una pena no poder deleitarnos con un cielo estrellado, la niebla lo impidió y nos quedamos con las ganas.
Hoy han sido 19.7 kms tras 8 horas de camino y salvando + 1300 m. de desnivel.
Mañana última etapa...esto se acaba...
Bona nit y fins demà.






2 comentarios :

Angel dijo...

Uau. Esta si que si, excelente etapa montañera.

Qué bien lo pasasteis, vaya teeeeela!!

Daniel Alcalá Almela dijo...

Hola Paco.

Otro tramo y otra cima a la butxaca, aunque sea por segunda vez.

Menudo contratiempo lo del desayuno, pero a la montaña "anem a patir,¿no?" jejeje.

Un abrazo.